Un hombre que ingresó junto a su mujer (la mamá de un alumno) a la Escuela de Jornada Completa Nº 15 D.E. 15 “Manuel Antonio Acevedo” de Coghlan (Comuna 12),desató una batalla campal de la que los alumnos fueron involuntarios testigos, en momentos en que se desarrollaba un acto escolar.
El episodio sucedió durante un acto escolar realizado el martes último, cuando una pareja comenzó a discutir, provocando molestias al resto de los presentes, y entorpeciendo el desarrollo del acto.
Ante los reiterados pedidos de silencio, el hombre y la mujer que discutían agredieron físicamente a una mamá que estaba filmando el evento que se quejaba porque los gritos no le permitían captar el audio normal del acto.
La agresión desató una obvia respuesta por parte de la mujer agredida y su marido, y el salón de la escuela se convirtió en un campo de batalla. Dos agentes de la policía que intervinieron ante el llamado de las autoridades de la Escuela, fueron también agredidos por el hombre identificado como César Hugo Funes.
En medio de todo esto quedaron los alumnos -niños y niñas de entre 5 y 12 años- que presenciaron azorados la violenta escena.
Daniel, uno de los padres involucrados, relató lo sucedido, en exclusiva, a parabuenosaires.com: “Estábamos junto a otros padres participando de un acto escolar; mi mujer -que filmaba el número artístico- les pidió a esta pareja, que no paraba de discutir, que bajaran la voz porque la discusión estaba quedando registrada en la grabación. Ante el pedido, no sólo no cesaron sino que el hombre, al salir, amenazó a mi señora con esperarla afuera y su mujer, sin dudarlo, golpeó a mi esposa -¡que sólo les había pedido que bajaran la voz!- y comenzaron a tirarse del pelo. En ese momento, otros padres intervinieron para que cesara la pelea, y este hombre volvió a entrar y, en lugar de separar, empezó a tirar golpes de puño contra mi esposa. Al ver eso, le metí un piñazo para que parara de golpear a mi mujer. El hombre cayó contra las sillas, y cuando se levantó salió afuera, sacó una navaja y tiró un puntazo a otro padre, que por suerte no le dio. En ese momento nos metimos adentro, cerramos la puerta de la escuela y el hombre quedó afuera, dando vueltas y golpeando contra el vidrio. Llegó el patrullero y uno de los policías que intentó agarrarlo, terminó en el piso. Entonces intervino otro policía y lograron reducirlo ¡Pero no lo esposaron! y el hombre -desde adentro del patrullero- seguía amenzándonos. De la escuela nos fuimos a la comisaría para hacer la denuncia correspondiente. Mientras todavía yo estaba prestando mi declaración, se dispuso la liberación del violento, que dentro de la dependencia policial, frente a los agentes, irónicamente nos preguntaba ¿Te gustaron los golpes, las piñas que te di?´, además de seguir amenazándonos. Lo sucedido en el destacamento está todo filmado por las cámaras de la policía”.
La Directora de la escuela, Patricia, transmitió a los padres en el día jueves el pedido de sentidas disculpas por parte de la mamá que inició el conflicto y prometió que su pareja no volvería a acercarse al establecimiento. Los padres, no conformes, buscan ahora con suma preocupación que la violencia no vuelva a irrumpir en la comunidad escolar y piden garantías de que esta persona no vuelva a acercarse a la escuela, mediante una orden de restricción expedida por la Justicia.
Fuente: parabuenosaires.com