Skip to main content
  • Gustavo Carpinella
  • Seguridad

El Gobierno de la Ciudad despide a la cúpula de la Policía tras la fuga de 17 presos

En respuesta a los acontecimientos ocurridos en la Alcaidía 9, ubicada en la calle Gana al 400, en el barrio porteño de Liniers.

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires tomó la desición  para enfrentar la crisis y reforzar la seguridad tras la fuga de 17 presos en al Alcaldía 9 de Liniers. El jefe de Gobierno, Jorge Macri, se reunió esta mañana con el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, para analizar lo sucedido y decidió remover a la cúpula de la Policía.

La fuga de los reos se realizó a través de un hueco en una pared de ladrillo de un patio interno. En menos de un mes se produjeron tres escapes de detenidos en la Ciudad, dejando expuestas las vulnerabilidades de las fuerzas de seguridad porteña.

A fines de noviembre,  once detenidos  escaparon de una comisaría en Barracas y otros dos se fugaron del Centro de Contraventores de Pompeya.

Entre las decisiones adoptadas, se resolvió que el jefe de la Policía, Pablo Kisch, y el súbdito, Jorge Azzolina, fueran reemplazados por los comisarios generales Diego Casaló y Carla Mangiameli. Asimismo, se dispuso la separación del cargo del Director de Alcaidías, mientras se avanza en la investigación sobre lo ocurrido. 

En este sentido, se está trabajando con el Fiscal General, Juan Mahiques, para realizar una investigación exhaustiva al interior de la fuerza para determinar responsabilidades. Asimismo, la División Unidad Táctica de Intervenciones en Alcaidías (DUTIA) está realizando requisas y profundizará los controles.

En paralelo, los Ministerios de Seguridad de la Ciudad y de la Nación, a través de la Policía Federal, están articulando acciones en búsqueda de los evadidos.