El Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, vetó la ley que buscaba expropiar el Cine Aconcagua para convertirlo en un Centro Cultural para todos los vecinos. La norma había sido aprobada el pasado 24 de noviembre por la Legislatura porteña, incluso por Diputados oficialistas. Con este medida se da un paso atrás con la recuperación del viejo cine de barrio y es un duro golpe para los vecinos de la Asociación Civil Aconcagua y de todos los que añoraban que este viejo cine de barrio volviera a funcionar.
Mediante el decreto 726/11, publicado en el boletín oficial, el Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, vetó la ley de expropiación del Cine Aconcagua que tenía como fin convertirlo en un centro cultural para todos los vecinos.
En sus argumetos expone: “El inmueble cuya expropiación se propicia se encuentra ubicado en la Comuna 11, donde ya existen centros culturales dependientes del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, y continúa “Se estima conveniente priorizar la creación de centros culturales en otras zonas de la Ciudad, donde el acceso a los bienes y servicios culturales son menos cercanos a los vecinos”.
Más adelante, justifica "El artículo 4º del proyecto dispone que los gastos que demande el cumplimiento de la norma serán imputados a la partida presupuestaria correspondiente de la Ciudad de Buenos Aires, del año 2011," y continúa “Asumiendo que la norma se refiere al Presupuesto General de la Ciudad del año 2011, resulta imposible llevar a cabo el procedimiento expropiatorio antes de la finalización del año allí indicado”.
El veto esta firmado por Mauricio Macri; el Ministro de Cultura, Hernán Lombardi; el de Hacienda, Néstor Grindetti; y el Jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta.
El Aconcagua, se mantuvo abierto desde el 5 de noviembre de 1945 hasta mediados de la década de los 90’ donde se vio obligado a cerrar sus puertas debido a las bajas recaudaciones y los pasivos que lo jaqueban. A partir de su cierre fue alquilado por una Iglesia evangelista de origen brasilero que se mantuvieron como locatarios durante varios años pero ante su retirada (a fines del 2009) y los rumores de demolición del edificio este grupo de vecinos se comenzó a movilizar para recuperar este espacio de la cultura para nuestros barrios.
Con el veto queda sin efecto la Ley 4019 de expropiación y con ella la ilusión de muchos vecinos que veían que su lucha estaba dando sus frutos y que se concretaba el sueño de que el Aconcagua vuelve a abrir sus puertas. Aunque aseguran que "no cesaran en su lucha".