No hubo acuerdo por el conflicto de las nuevas estaciones del subte B
La Asociación Gremial de Trabajadores de Subterráneos y Premetro no llegó a un acuerdo con el gobierno porteño respecto de la seguridad y las comunicacones en las dos nuevas estaciones. Pasaron a cuarto intermedio hasta el viernes a las 11.
En consecuencia continuará el esquema diagramado hasta hoy que consiste en que los conductores se bajen en la estación Los Incas y allí personal jerárquico guíe los trenes hacia Juan Manuel de Rosas y Esteban Echeverría.
El titular de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP), Néstor Segovia, dijo que el gobierno porteño "no quiere reconocer el problema, no creen lo que les decimos, entonces buscan un culpable que para ellos son los trabajadores".
"Macri se apresuró a inaugurar ya que dos estaciones que no tienen el sistema de comunicación tierra-tren no es segura. Nos dijeron que recién en seis meses van a solucionar este problema pero a todo esto se suma que el gobierno porteño no quiere poner más formaciones con dos estaciones más", dijo el sindicalista.
La AGTSyP asegura que ambas plataformas tiene filtraciones de agua en varios puntos de la construcción por lo que cuando llueva habrá peligro de electrocución, al tiempo que denunció el alto riesgo que significa utilizar celulares para comunicarse.
"Quieren poner las misma cantidad de formaciones pero al extenderse la línea tienen que poner más personal, más coches, hacer un diagrama nuevo, es obvio, con igual cantidad de trenes los pasajeros viajarán como `sardinas` con el riesgo de electrocución cuando llueve", aseguró el delegado.
El jefe de gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, manifestó durante un acto que "nadie entiende" esta medida gremial porque "la Justicia ya dijo que no hay riesgo".
El funcionario señaló que "tras la denuncia de los trabajadores el juez la rechazó y dice que no hay ningún riesgo de seguridad en las estaciones, gente de Seguridad Laboral también lo vio, ambos dicen que no hay riesgo de seguridad".
"Mauricio (Macri) fue claro, no nos van a frenar", enfatizó, y dijo que "nadie entiende, ni la gente ni nosotros por qué sigue la medida después de lo que dijo el juez".
El gobierno porteño propuso que por seis meses los conductores se comuniquen con celulares y telefonía fija al no poder instalar el sistema de radio que les permite a los conductores conectarse "punto a punto" con el jefe de tráfico.
Proponen además conformar una comisión de seguridad e higiene para seguir el problema de las filtraciones, mientras que aseguran que el origen del conflicto es que los trabajadores se niegan a dar cinco vueltas y pretenden circular cuatro veces para tener más tiempo de descanso.
"Si ellos querían decir que no queremos laburar por el nuevo diagrama (cantidad de vueltas), es una mentira total, nosotros decimos que las estaciones tienen malas condiciones y de esa forma no vamos a trabajar", remarcó Segovia.
"Un teléfono a nosotros no nos conforma" dijo el sindicalista y afirmó "ya no es un problmea de la línea B, es un problema de todas las líneas, ellos quieren cambiar el eje por una candidatura y se están equivocando".
El delegado de la línea B Claudio Della Carbonara dijo que "el problema no es el diagrama, eso lo podemos discutir más adelante, hace años que venimos denunciando que falta mantenimiento" y remarcó: "ya murió un compañero nuestro por la desidia y la complicidad del gobierno porteño con Metrovías.
Télam