Tensión en Villa Urquiza y amplio operativo de seguridad por un hombre atrincherado

Hubo despliegue de Policías y Bomberos; el hombre fue reducido y llevado en ambulancia esposado.

 La tranquilidad del mediodía del miércoles se vio alterada en pleno centro de Villa Urquiza por un hombre que se atrincheró en su vivienda y amenazó con palos y cuchillos a quienes querían detenerlo. La situación provocó tensión, preocupación y un fuerte operativo de seguridad. Tras casi una hora, la persona fue reducida y trasladada en ambulancia, esposado.

Todo se dio en Cullen al 5200, entre Bauness y Bucarelli, pasadas las 13 horas. En el primer piso de un inmueble aparentemente tomado, un hombre en notorio estado de desborde emocional amenazó primero a sus convivientes, por lo que dieron el alerta policial. De inmediato se acercaron patrulleros de la Policía de la Ciudad.

La situación fue aumentando su tensión. Por un lado, la coincidencia con la salida de las escuelas situadas a metros de allí, como el Colegio Francisco Coll o el Colegio Nuestra Señora del Carmen hizo que muchos niños y adolescentes tuvieran que ser puestos a resguardos. Asimismo, se vedó el tránsito en Cullen y se impidió la circulación en las veredas, a excepción de los frentistas.

Sin cesar se fueron acercando más efectivos de la Policía de la Ciudad, junto con personal de Bomberos de la Ciudad y el Grupo Especial, con uniforme camuflado y armas largas. Durante quince minutos, el hombre permaneció en el balcón de la vivienda, insultando a los efectivos y golpeando con un barrote la baranda. También se lo vio portando un cuchillo y amenazando con que atacaría a quienes quisieran entrar a detenerlo. 

En un momento de quiebre, el hombre se provocó heridas cortantes y hasta amenazó con tirarse del balcón. Por ello, Bomberos desplegaron la habitual carpa de aire para amortiguar cualquier posible caída. La presencia de un negociador, que dialogaba a los gritos con el hombre, fue clave para serenarlo. Y finalmente sin que amerite cualquier ingreso violento, fue reducido por el personal policial.

Hacia las 14.15 horas, la persona, de unos 30 años de edad, fue retirado en una camilla hacia una ambulancia del SAME para evaluar su estado de salud. Por las amenazas, quedó bajo vigilancia policial y esposado. Recién una hora depués se liberó el tránsito y retomó la calma a la esquina urquicense.