Trasladaron a Sudáfrica a 41 monos que se encontraban encerrados para experimentos en el CEMIC Saavedra
Organizaciones defensoras de los derechos de los animales habían estado reclamando hace años.
Durante largo tiempo, y con más insistencia, organizaciones defensoras de los derechos de los animales y ecologistas habían sostenido reclamos en redes sociales y en la sede del CEMIC Saavedra contra la presencia de monos. Es que en el subsuelo del centro de salud, uno de los más reconocidos de la Comuna 12, existió durante décadas un área de investigación que trabajaba con estos primates para hacer experimentos.
Sin embargo, este miércoles se puso fin a esa etapa. 41 monos que permanecieron hasta el momento en jaulas del hospital de Galván 4102 fueron trasladados en un vuelo hacia Sudáfrica. El viaje se iba a hacer el pasado viernes, pero un fallo judicial a último momento lo había impedido. Finalmente la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), a cargo Carlos Rolero Santurián, autorizó el viaje.
El fallo plantea que los monos capuchinos encontrarán "una mejor calidad de vida". Su nuevo destino será el Hidden Forest Sanctuary, KwaZulu-Natal, que precisamente acoge a animales que han estado en laboratorios. La decisión fue fruto de un acuerdo del CEMIC con la Subsecretaría de Ambiente de la Nación y fundaciones ecologistas de Europa, que organizaron la logística y costearon el vuelo.
El reclamo de las organizaciones defensoras de los derechos de los animales llevaba anos. El bioterio, que es el ámbito en el cual se alojan a especies de animales para hacer experimentos médicos, funcionó en el centro de salud de Saavedra entre 1983 y 2021, cuando fue cerrado y desmantelado debido a las presiones. Pero el reclamo pedía la liberación de los animales, que no tenían contacto con la luz exterior.
Distintos grupos, dentro de los cuales el más resonante era el "Proyecto Gran Simio", hicieron manifestaciones y escraches en la puerta del CEMIC. La intervención de la Defensoría del Pueblo porteña y la Justicia logró que el centro de salud habilitara una visita a finales del año pasado al bioterio.
De todos modos, esta no será el final de la historia. Es que además de los 41 monos trasladados, hay otro grupo cuyo estado de salud no es propicio para el viaje. El número de los mismos no es exacto (serían entre 7 y 16, según distintas fuentes), y por ahora permanecerán en el lugar al no hallarles aún un destino que puedan afrontar sin riesgos.